Reflexología Podal

¿Qué es la reflexología podal?

Podemos definir la reflexología podal como una terapia natural complementaria a la medicina tradicional, basada en la teoría de que existen zonas reflejas en los pies que se corresponden con las diferentes partes de nuestro cuerpo. Esta técnica parte de la idea de que los pies representan una imagen esquemática de la totalidad del cuerpo y sus órganos.

La reflexología podal utiliza el masaje y la presión de forma delicada en ambos pies, para estimular los puntos reflejos con el fin de calmar y aliviar la tensión del cuerpo. Los puntos reflejos son la correspondencia exacta de otras partes, órganos y glándulas del cuerpo. La manipulación de puntos reflejos específicos en los pies provoca una respuesta refleja favorable e involuntaria en la parte relacionada del cuerpo. Los pies también reflejan el estado de la mente, el cuerpo y el alma mediante la textura y condición de sus plantas.

La reflexología podal en una terapia natural segura, sencilla y no invasiva. No entiende de edades, es una terapia que puede ser recibida por cualquier persona a cualquier edad, incluso los recién nacidos. Hay que tener presente que la reflexología podal no es una terapia para diagnosticar una enfermedad ni es un tratamiento médico. Es una terapia natural complementaria a la medicina tradicional que ayuda al cuerpo a recuperar su equilibrio natural, que tiene en cuenta tanto los factores físicos y el entorno de la persona que podrían estar afectando a su bienestar.

Para entender mejor cómo funciona esta terapia, vamos a ver un mapa de reflexologia podal en donde se muestra la ubicación de los puntos reflejos de nuestro cuerpo en los pies. Un mapa completo tiene diferentes vistas del pie desde distintos ángulos: la planta del pie, los lados del pie y desde arriba. Es importante saber que los puntos indicados en el pie izquierdo corresponden a nuestro lado izquierdo del cuerpo y los indicados en el derecho a la mitad derecha. Muchos órganos y partes del cuerpo se ven reflejadas en ambos pies. Lo representado en el interior del pie tiene que ver con reflejos espinales, y lo representado en el exterior con la parte exterior de tu cuerpo.

¿Cómo puede ayudarme la reflexología podal?

Cada vez hay mayores niveles de estrés en la vida cotidiana y es importante tomar conciencia de que este factor puede pasarnos factura a nuestra salud. Muchas personas usan la reflexología como una forma agradable de relajar el cuerpo y la mente y contrarrestar el estrés y la ansiedad.

También es común usarla como forma de aliviar molestias, dolores y malestares generales. Por los general, después de recibir una sesión, la tensión corporal se reduce y nos sentimos más relajados. Es común notar que mejora la calidad de nuestro sueño por las noches y que nuestro estado de ánimo y sensación de bienestar mejoran.

Orígenes de la reflexología

La reflexología es una técnica milenaria. Los primeros datos encontrados sobre el inicio de la reflexología se remontan al 2300 A.C. en Egipto, donde ya se practicaba esta terapia según ciertos jeroglíficos e inscripciones halladas en la tumba de un médico. En ellos se reflejaba como aplicaban esta técnica en pies y manos. También se practicaba este tipo de masaje en otras culturas como la India y la China.

La traducción de los jeroglíficos que lo acompañan dice así: “No me hagas sufrir” dice el paciente y el terapeuta contesta “agradecerás lo que te hago”.

La reflexología moderna nace a principios del sigo XX cuando el Dr. William Fitzgerald redescubriendo el antiguo método chino de la “Terapia Zonal”. Descubrió que aplicando presión en una parte del cuerpo podía crear una respuesta refleja en otra parte. Creía que las zonas reflejas en los pies y las manos estaban vinculadas a otras áreas y órganos del cuerpo dentro de la misma zona.

Así pues, dividió el cuerpo en diez zonas afirmando que lo que sucede en un sector de esa zona afecta a la zona entera. De esta forma se podía trabajar sobre órganos internos, sobre el sistema nervioso, circulatorio, endocrino, etc…y en muchos casos consiguiendo más resultados que tratando directamente sobre la zona afectada, principalmente cuando se trata de calmar el dolor.

En la década de 1930, Eunice Ingham, una joven fisioterapeuta, desarrolló aún más la “Terapia Zonal” y sentó las bases de la reflexología como la conocemos hoy día. Ella fue la que determinó que los reflejos en los pies, las manos y las orejas da una imagen exacta de los órganos del cuerpo. La técnica de reflexoterapia puede hacerse en las manos, las orejas, la cara… aunque el más popular y probablemente el más efectivo es el masaje podal.

¿Qué ocurre durante un tratamiento de reflexología?

¿Qué ocurre exactamente en nuestro primer tratamiento de reflexología ? ¿Qué nos vamos a encontrar? ¿En qué consiste la sesión?

Previo al tratamiento de reflexología

Es importante que, antes de acudir a la consulta del reflexólogo consultemos con nuestro médico de cabecera. Él nos dirá si la reflexología es adecuada para nosotros o si existe algún inconveniente, dado que, la reflexología es un tratamiento individualizado y lo que a unos nos sienta bien, a otros no tiene por qué serles beneficioso. Dicho esto vayamos al tema.

En la consulta del reflexólogo

Fase consulta

La primera vez que vayamos a la sesión de reflexología, el terapeuta nos hará una serie de preguntas relacionadas con nuestro estado de salud, antecedentes médicos, etc. El objetivo de estas preguntas es valorar si somos idóneos para recibir un tratamiento de reflexología o si por el contrario, existe alguna cuestión que desaconseje el tratamiento.

Además , el reflexólogo también nos preguntará por nuestro estilo de vida y costumbres personales, que le ayudarán a formarse una imagen completa de nosotros. Toda esta información es estrictamente confidencial y ayudará mucho al terapeuta a prepararnos una sesión de tratamiento totalmente personalizada, así que, no hay que temer en ser sinceros porque los beneficios son muchos.

Después de la consulta, el reflexólogo valorará la información que le hemos dado y preparará la sesión en función de lo que le hemos dicho. Luego nos contará como ha planteado la sesión, como va transcurrir exactamente, el tiempo que va a durar, los puntos reflejos en los que va a incidir en función de nuestras necesidades, etc.

Fase tratamiento

Después de la fase de consulta, pasamos directamente a la fase de tratamiento. Nos invitará a sentarnos en una silla reclinable desde la que vamos a recibir el tratamiento. Solo deberemos quitarnos los zapatos y los calcetines.

A continuación el reflexólogo examinará cuidadosamente nuestros pies, que le ayudaran a obtener información sobre nosotros. Un ejemplo… ¿sabéis que los reflexólogos interpretan que las zonas endurecidas que tenemos en los pies se han formado para proteger los puntos reflejos mas sensibles?

Antes de empezar, el terapeuta nos lavará los pies. El tratamiento comienza con un masaje de pies para conseguir que nos relajemos y preparemos para la reflexología. El reflexólogo usará sus manos para trabajar los pies, no utilizará herramientas ni ningún tipo de complemento. Tampoco utilizará cremas ni lociones, pero es posible que utilice algo de polvos de talco para disminuir la fricción.

Utilizará técnicas de reflexología especializadas para aplicar presión en los pies de una manera sistemática, garantizando que todos los reflejos se trabajan. Cuando esté trabajando algún reflejo que esté congestionado, puede ser que sintamos algo de dolor o incomodidad, pero esto suele ser algo puntual, dado que, lo normal es que nos sintamos cómodos en todo momento, tan cómodos que incluso nos durmamos. 😀

Algunas personas tienen cosquillas en los pies y eso les preocupa. Si estáis en ese grupo de personas y temes sentirlas durante el tratamiento, no te preocupes, en las sesiones no sentiréis cosquillas, porque los pies son tratados y masajeados de una forma específica y totalmente profesional en la que no hay cabida a las temidas cosquillas.

Hay ocasiones en las que el terapeuta puede decidir realizarnos una sesión de reflexología en las manos en vez de los pies… ¿Por qué? por ejemplo, porque tengamos una herida o infección en un pie, o porque no tengamos tiempo suficiente para un tratamiento en los pies o simplemente porque nosotros prefiramos que nos traten las manos en vez de los pies por razones de comodidad o preferencia personal. No os preocupéis, la sesión será igualmente eficaz para nuestra salud.

Conclusiones

Para finalizar el tratamiento termina con un masaje vigorizante. Después del tratamiento el reflexólogo hablará con nosotros y nos preguntará como nos hemos sentido. Igualmente él nos comentará cualquier circunstancia anómala o relevante para nuestra salud, que hubiera notado durante la sesión. También nos comentará la idoneidad o no de recibir un ciclo de sesiones, pero eso ya queda a nuestra libre elección.

Bueno, si al final os decidís a probar esta terapia, espero que estas líneas os hayan servido de ayuda para despejar posibles dudas. Aquí os dejo un vídeo de una sesión de reflexología:

Métodos de reflexología

La reflexología tal y como lo conocemos hoy en día comenzó como una teoría llamada “terapia zonal” en los Estados Unidos a principios del siglo XX, gracias al Dr. William Fitzgerald y a la Dra. Eunice Ingham, que crearon un mapa anatómico del cuerpo sobre el pie, señalando los puntos reflejos de todo el cuerpo. Aunque la mayoría de las culturas antiguas tenían algún tipo de terapia del pie, muchas se habían desvanecido y este período de tiempo vio renacer de nuevo la reflexología podal. Dados sus orígenes antiguos, la reflexología se ha convertido en una terapia con una amplia gama de estilos y enfoques, pero todos igualmente eficaces. Hablaremos de:

Principales métodos de reflexología:

• Método Rwo Shur: desarrollado por el padre Joseph Wugster.
• Método Ingham: desarrollado por la fisioterapeuta Eunice Ingham
• Método de Terapia Zonal

El Método Rwo Shur

Practicado en muchas partes de Asia, este método de reflexología combina técnicas de pulgar-deslizante y de presión, la incorporación de los nudillos y a veces pequeños palos de madera. La presión es firme y la terapeuta utiliza una crema para mejorar el movimiento de las manos sobre los pies. Una sesión suele durar unos 30 minutos y se centra más en la revitalización que en la relajación.

El método Rwo Shur fue desarrollado en Taiwán por el padre Joseph Eugster, un misionero suizo aquejado de artritis reumatoide. Después de experimentar los beneficios de la reflexología en sí mismo, vio el potencial de ayudar a millones de personas necesitadas con esta terapia simple y comenzó a tratar y a iniciar a otros en la reflexología.

El Método Ingham

Este es el método de reflexología más común practicado entodo el mundo hoy en día. Fue desarrollado por Eunice Ingham, fisioterapeuta de profesión y considerada por muchos como la “madre de la reflexología”. Este método conocido como “método Ingham de masaje de comprensión” se basa en trabajar con los pulgares y el resto de los dedos.

La presión se aplica “caminando con los dedos”, doblando y estirando el pulgar u otro dedo mientras se mantiene una presión constante en la zona del pie sobre la que se está trabajando. La medida de la presión ejercida depende de la tolerancia al dolor del paciente. El terapeuta no utiliza cremas o aceites, pero sí puede utilizar un poco de polvos de talco en las manos para reducir la fricción.

Las sesiones suelen durar en torno a una hora y son integrales, es decir, se trabajan todos los puntos reflejos del pie (aunque en algunos se inciden más que en otros), dado que la terapia se centra en la relajación y en el equilibrio de todo el cuerpo.

Eurice Ingham fue quien desarrolló sobre los pies mapas anatómicos de todo el cuerpo.

Reflexología ayurvédica, método ayurveda

La reflexología ayurvédica se describe mejor como una mezcla exitosa de las filosofías y técnicas orientales y occidentales. Se basa en los principios del Ayurveda. Se trata de un sistema médico tradicional y ancestral, con origen en la India.

La reflexología Ayurvédica ofrece al terapeuta un nuevo y emocionante enfoque para tanto el pie como la mano. Fue desarrollado en Australia por Sharon Stathis y ahora se utiliza de forma rutinaria en al menos quince países. El objetivo de este enfoque es ayudar a equilibrar los sutiles sistemas de energía del cuerpo apoyándonos en el flujo eficiente de la energía vital.

La energía vital fluye dentro del cuerpo a través de micro canales de energía (similar a los meridianos chinos de los que hablamos en la anterior entrada).

Según las enseñanzas de Ayurveda, el cuerpo (y la mente) no pueden permanecer sanos si el flujo de energía vital es lento o interrumpido.

Situado a lo largo del cuerpo, los micro canales de energía son centros de energía vital, que ayudan a mantener el flujo óptimo de energía vital. Hay centros de energía vital ubicados en micro canales de energía importantes en cada mano y pie. Todo el cuerpo se beneficia del trabajo de estos puntos situados en manos y pies, en las sesiones de reflexología ayurvédica.

Nuevos enfoques

En estos últimos años, han evolucionado rápidamente nuevas técnicas y enfoques, al igual que terapeutas de todo el mundo que desarrollan y comparten sus experiencias y hallazgos clínicos. Cada vez más, los puntos de acupresión los conceptos relacionados con las terapias de energía se utilizan dentro de las sesiones de reflexoligía. La reflexología en manos, cara y orejas, aunque no son técnicas nuevas, se está empezando a utilizar más ampliamente ahora, además de la reflexología podal.

Los terapeutas podrán masajearnos los pies, las manos y las orejas en una sola sesión, o podrán seleccionar el área refleja que estime más adecuada para el cliente. En el Reino Unido, los reflexólogos están investigando y practicando una amplia variedad de métodos y técnicas. Esto significa que el terapeuta puede adaptar las sesiones a las necesidades específicas de cada cliente.

Diferencias entre el masaje de pies y la reflexología podal

A menudo surge la duda de ¿Cuáles son las diferencias entre el masaje de pies y la reflexología podal? Se trata de una duda muy razonable ya que, a simple vista pueden resultar muy parecidos y no notar diferencias sustanciales, así que, pensé que sería interesante escribir algunas claves que los diferencian. Con esto no trato de decir que uno sea mejor que otro, ni mucho menos!!!

Creo que podemos obtener muchos beneficios bien sea recibiendo un masaje de pies, como en una sesión de reflexología podal. Todo depende de las necesidades de cada uno. Esta reseña es sólo para señalar las principales diferencias existentes entre ellos.

Objetivos de la reflexología podal

El objetivo de la reflexología podal es equilibrar el flujo de energía en todo el cuerpo mediante la estimulación de los puntos reflejos en los pies (o manos).

La reflexología se basa en la teoría de que la energía fluye por todo el cuerpo y que, mientras esta energía puede fluir libremente, nuestro cuerpo, mente y espíritu estarán equilibrados y en armonía.

Sin embargo, si se percibe un bloqueo de la energía, el reflexólogo ve esto como un desequilibrio energético que puede resultar perjudicial para la salud si no se trata.

Objetivos del masaje en los pies

Los masajes de pies tienen como objetivo relajar al cliente y aliviar la presión por el roce de los músculos, tendones, ligamentos, la piel y las articulaciones de los pies.

Técnicas de reflexología podal

Los terapeutas utilizan métodos y técnicas de reflexología variadas durante los tratamientos, por ejemplo:

• Presionando en los pies con el pulgar en movimientos cortos sobre un área concreta
• Presionando profundamente en un reflejo específico del pie
• Presionar profundamente, moviendo el dedo pulgar hacia arriba
• Sostener ligeramente dos puntos reflejos separados con el fin de equilibrar la energía entre ellos

Técnicas de masaje de pies

El effleurage es una técnica de masaje que consiste en pasar ligeramente toda la mano, la extremidad de los dedos o bien la cara dorsal de las falanges, con el puño cerrado, sobre la región que debe tratarse.

Medios usados en reflexología

Los reflexólogos normalmente no utilizan ningún tipo de soporte accesorio en sus tratamientos. Algunos utilizan una pequeña cantidad aceite, crema o polvos de talco, pero sólo lo suficiente para disminuir la fricción entre manos y pies y poder trabajar fácilmente sobre la piel. El reflexólogo no quiere que el pie se vuelva demasiado resbaladizo, ya que necesitan trabajar los puntos reflejos, y esto les dificultaría mucho su labor.

Medios usados en los masajes

Por lo general, en una sesión de masaje de pies se suele usar una buena cantidad de aceites o cremas, que ayudan a conseguir la relajación del cliente.

Rutina de un reflexólogo

Un reflexólogo sigue unos pasos específicos en sus sesiones de tratamiento con el fin de garantizar que se estimulan todos los reflejos de los pies, y así estar seguros de que identifican cualquier desequilibrio que pudiera existir. El terapeuta incidirá durante más tiempo en las áreas que consideran oportunas con el fin de restablecer el equilibrio de nuestro cuerpo.

Rutina de un masajista

Un masaje de pies también puede tener una rutina establecida, pero no se realiza con el fin de restablecer el flujo de energía. Lo normal es que el masajista dedique más tiempo a las áreas más tensionadas, con el fin de conseguir relajarlas.

¿Qué es la reflexología vertical?

La reflexología vertical es un método de aplicar la terapia mientras permanecemos de pie, soportando nuestro propio peso. ¿Esto qué significa?…pongamos dos ejemplos:

• Permanecemos de pie para recibir un tratamiento de reflexología vertical en los pies
• Presionamos las manos contra una superficie dura para un tratamiento de reflexología vertical en las manos

Hay que decir que este método no es tan relajante como la reflexología convencional dado que, hay que estar en posición vertical para recibirlo. Sin embargo, este método es muy usado en situaciones tales como:

El tratamiento se recibe fuera de una consulta y no hay una silla reclinable que se pueda usar.
Porque exista alguna razón por la que le resulte incómodo reclinarse o sentarse en una silla reclinable. Por ejemplo, una mujer embarazada que le resulte incómodo recostarse por sentir mareos, o quizá una persona que sufra de ciática y le resulte más cómodo estar de pie.

Disponemos de poco tiempo. Un tratamiento completo de reflexología vertical puede durar en torno a 20 minutos, debido a que el reflexólogo sólo trabaja la parte superior y los lados de los pies.

La persona sufre una dolencia crónica y quiere incorporar la reflexología vertical a su tratamiento de reflexología convencional para conseguir así un impulso adicional.

Existen muchas dudas acerca de la reflexología vertical y si es igual de efectiva que la reflexología convencional, dado que las sesiones son más cortas y no se trabajan las plantas de los pies. Es entendible que se pueda llegar a pensar que este tratamiento no es tan bueno.

Es cierto que el reflexólogo no trabaja la planta de los pies de forma directa, sin embargo, el terapeuta utiliza el peso del cuerpo para ayudar a trabajar los puntos reflejos situados en las plantas de los pies, accediendo también desde la parte superior (empeine) y desde los laterales de los pies.

¿Es la reflexología vertical tan eficaz como la reflexología convencional?

Muchos terapeutas creen que la reflexología vertical puede ser más eficaz que la reflexología convencional. Esta idea se basa en que cuando cargamos peso sobre los pies (o sobre las manos), los nervios de estas zonas se vuelven más sensibles de lo que estarían si los pies o manos estuvieran en una posición relajada (es decir, sin cargar peso). Por tanto, la estimulación de los reflejos se lleva a cabo mucho más rápido a través de un sistema nervioso más sensibilizado.

¿Es compatible la reflexología vertical con la reflexología convencional?

Por supuesto. Se podrían combinar ambas técnicas. Podríamos programar unos 5 minutos de reflexología vertical antes o después de un tratamiento de reflexología convencional ¿Qué es más conveniente antes o después? Esto depende de nuestras preferencias personales y de hablarlo con nuestro reflexólogo y ver cuál es la mejor opción.

Podemos preferir la reflexología vertical al principio de la sesión y así descansar y disfrutar del resto del tratamiento o podemos preferir ponerlo al final de la sesión para así optar por poner más énfasis en los reflejos desequilibrados que el reflexólogo pudiera encontrar durante el tratamiento convencional.

Aquí tenéis las claves de la reflexología vertical que, tanto de forma individual como combinada con la reflexología convencional, es una forma eficaz de tratamiento, que os animo a probar.